La Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio ha recibido, a través de la Agencia de Obra Pública de la Junta, ocho ofertas para el contrato de suministro e instalación de 24 nuevos desfibriladores que se colocarán en las 23 paradas en superficie y en el edificio de Talleres y Cocheras del Metro de Granada. Las tres estaciones subterráneas ya disponían de este equipamiento.
El concurso salió a licitación por 109.408,20 euros y será adjudicado una vez concluido el periodo de evaluación de las ofertas presentadas. Con este nuevo contrato, todas las paradas y estaciones de metro, como espacios públicos densamente transitados, contarán con desfibriladores externos automáticos, lo que va a posibilitar que una parte importante de la población servida que vive a menos de 500 metros de las paradas y estaciones de metro, se encuentre en una zona cardioprotegida.
Esta actuación se encuadra en las mejoras del servicio que viene implementando la Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio desde el inicio de la legislatura, al objeto de mejora la prestación de este sistema de transporte, consolidando la seguridad y la calidad del mismo. Entre dichas mejoras introducidas por la Consejería que dirige Marifrán Carazo figura la apertura del nuevo punto de información de Albolte, la ampliación de los horarios del fin de semana para adaptarse a la salida de los primeros trenes AVE de Granada o los contratos de mantenimiento correctivo del material móvil, así como la reciente adjudicación de la actualización del software del sistema de billetaje del metro para posibilitar el pago con tarjeta bancaria.
Estos nuevos desfibriladores, capaces de prevenir las paradas cardiorespiratorias, se instalarán en lugares visibles de las paradas de metro, junto a las máquinas expendedoras, y convertirán la línea de transportes, que ya cuenta con desfibriladores en las tres estaciones soterradas de Camino de Ronda/Avenida de América, en una zona cardioprotegida.
Los volúmenes de pasajeros estimados para los primeros años de la explotación del metro ya determinaron la necesidad de disponer de desfibriladores en las instalaciones con mayor afluencia de usuarios, como son las estaciones de Méndez Núñez y Recogidas. El crecimiento de la demanda en las 23 paradas en superficie justifica esta nueva contratación, que incluye la formación del personal del metro en el uso de los dispositivos y su mantenimiento durante un periodo de cuatro años.
La normativa incluye, entre los espacios que están obligados a disponer de un desfibrilador, a las estaciones de metro con una afluencia media igual o superior a las 5.000 personas. Teniendo en cuenta el incremento progresivo de pasajeros que experimenta el Metro de Granada, la Consejería ha decidido instalar los desfibriladores en todas las paradas en superficie, facilitando así la posibilidad de poder actuar ante una parada cardiorespiratoria.
El Metro de Granada, infraestructura impulsada por la Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio, y cofinanciada con Fondos FEDER de la Unión Europea, consta de un trazado de casi 16 kilómetros de longitud, con 26 estaciones y paradas, que discurre por las localidades de Albolote, Maracena, Granada y Armilla. De ellos, 2,7 kilómetros discurren bajo tierra, a través del eje Camino de Ronda-Avenida de América en la capital granadina.